Los Manantiales

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Renovación para el alma

viernes, 13 de septiembre de 2013

La despedida de mi gran y único amor

La despedida de mi gran y único amor
Es realmente hermoso estar vivo para conocer el amor, lo que la gran palabra abarca, y poder conocerlo en todo su aspecto.
Gracias a Dios, lo pude conocer… Pero hoy lamentablemente, me toca conocer la otra cara del “amor”… Su lado amargo, tengo que separarme de la persona que más amé en mi vida, tengo que finalizar lo que fue para mí una hermosa historia de amor que hoy, tiene su final.
Él, que lleno de inmenso amor mi vida durante 42 años, lo tengo que despedir de mi vida… El amor de mi vida, el que me causo el inmenso dolor  ese dolor tan profundo, porque queda una herida abierta que sólo el tiempo cicatrizará… Atravesando el difícil momento que vivo, entendí aquella frase, “Nada es para siempre”…
Así es, estando junto a él, pensaba que todo, sí todo, era para siempre, pero hoy, me di cuenta que no. La frase es clara y simple, es entendible pero es muy dura de aceptar… Comprendí que el amor es una cascada de emociones, emociones intensas, alegrías y felicidades únicas, tristezas y angustias profundas…
Comprendí que el amor hay que saberlo cuidar, me arrepiento de no haberlo hecho… dejé que en lo que era nuestro amor y que sólo pertenecía a nosotros, terceras personas se involucraran, sus fiestas y sus salidas. Creía que nuestro amor era tan puro y verdadero… Comprendí que encontrar tú único y gran amor, no te garantiza la eternidad, te llena de felicidad y amor, pero no te garantiza que sea tuyo por siempre…
Comprendí, lo que es sentirse realmente triste, triste de verdad, cuando te duele el corazón de tanto llorar por el ser amado, no saben la gran tristeza que inunda mi alma, mi cuerpo, mi corazón, ese corazón que latía por nuestro amor todos los días… Comprendí que tengo que despedir a mi gran y único amor, ese hombre que marco a fuego todos los sentidos de mi vida. Comprendí, y me doy cuenta ahora, que estoy lejos de él, que realmente lo amé, y no saben ¡cómo lo amé!
Lo amé con tanta, tanta pasión e intensidad que es con la misma intensidad y pasión con la que lo lloro…Comprendí que el amor deja sus enseñanzas, buenas y malas, pero las deja…sé que hasta a esta altura el amor no es solamente rosa, el amor te lleva a conocer todos sus colores hasta los más grises, los más oscuros…
Comprendí que el amor enseña a crecer, amar, creer confiar compartir vivir el amor, junto a él aprendí cada uno de estos verbos y déjenme decirles que fui ¡feliz! Hoy comprendí, que tengo que tengo que vivir sin Él, aunque me duela en lo más profundo, pero cuando él tomó la determinación de irse. ¿Qué sé puede hacer?...
Comprendí que hay que darle tiempo al tiempo, y que el verdadero amor nunca se termina, que la pasión es pasajera. Hay que seguir…Comprendí que ya no puede producirme más dolor del que me causó.
Comprendí que para vuelva  una relación se tienen que cerrar las heridas del pasado para poder seguir adelante, si aún no cierra la herida pasada jamás podremos seguir adelante, porque esa herida se cicatriza  con el perdón y el amor.
Finalmente, me despido de él, delante de cientos de personas que leerán este texto, quizás fui cobarde por no despedirme en persona, como se tendría que hacer, pero no puedo… Si supieran lo que es para mí tenerlo frente a mí, mirar sus ojos y decirle, cuanto lo amo y que lo amaré para siempre…
Lo despido de mí, con profunda tristeza, angustia, con el corazón que ya no tengo, esta historia que empezó hace 42 años atrás hoy, finalmente, se escribe el cartel  Fin… Jamás pensé que podría suceder pero así lo es… Lo recordaré como siempre como el gran y único amor de mi vida, que me amó, me respetó y supo estar a mi lado cuando más lo necesitaba.

Olvidarlo ni arrancarlo de mí jamás lo podré hacer, porque vivirá siempre en mí, como un gran y hermoso recuerdo del inmenso amor que nos tuvimos, y que fue realmente un amor de verdad, unos de los pocos que sé pueden dar por estos tiempos. Olvidarlo… ¿cómo? si me une al de por vida, mis tres valiosos hijos…

Imposible olvidarlo porque mirar a mis hijos es recordar el precioso fruto que nació de un amor verdadero… Que duro es esto, que duro es el amor, que duro es llegar a su fin… En conclusión, comprendí que amar inmensamente a la otra persona no te garantiza que te amen de igual manera, quizás dar tanto amor no llega a ser suficiente…
Comprendí que el amor no lo hace todo…, pensé que tener el amor de la otra persona cuando vienen los tiempos difíciles aforrándonos de nuestro amor te sacaría adelante, siempre juntos, pero no es así…la realidad me mostró otra cara… Tengo que comprender y aceptar que ya no tendré sus besos, sus caricias, sus abrazos, sinceramente lo extrañaré muchísimo, muchísimo…
Pero si deseo con todo mi corazón que pase el tiempo y que pueda ver que todo lo que hice y dije fue por amarlo con gran intensidad, que tuve miedo de perderlo en varias situaciones, sólo yo sé lo tanto que lo amé.
Sí tienen a su lado a la persona que aman con todo su amor y pasen situaciones graves o no, lúchenla, sigan adelante, aférrense a ese gran amor que se tienen y jamás pero jamás dejen que terceras personas se involucren en su relación de pareja, la relación de pareja se constituye por dos personas, no dejen que esa relación sé desgastes sé corte se termine por deseos de personas que no quieren la felicidad de nadie.
Deseo con todo el corazón, que dentro de un tiempo, él, pueda, seguir adelante y ser feliz, le deseo con todo el corazón a mi amor…, que pueda encontrar la armonía y paz que necesita su interior.
Mi amor  me despido de ti, te amo como siempre lo hice, a pesar de todo, ¡te recordaré y amaré!... Hasta siempre y gracias por haber sido… ¡mi gran y único amor!
 LUCY

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