Mary Jane Ondr siempre está sonriendo. “La gente me pregunta, ‘¿eres tan feliz como pareces?’ Yo respondo, sí; lo soy. Dios Siempre resplandece en nosotros, dice ella. Con un rostro fresco y llena de energía a los 86 años, Mary Jane atribuye su apariencia positiva a una niñez gloriosa. “Gracias a padres amorosos y alentadores, mi hermana y yo sobrevivimos la depresión económica. Ellos nunca permitieron que nada se interpusiera en el camino a nuestra felicidad.”
Los miembros de la familia mantuvieron su sentido del humor aún cuando los tiempos eran difíciles. Mary Jane se ríe de uno de sus primeros “regalos”. Sólo por gusto, llenó una caja con dinero de juguete. Se convirtió en un chiste ambulante, a medida que la caja pasaba de un familiar a otro. Llegó a ser una metáfora para una vida de dar gozoso.
La hermana de Mary Jane, Ruth Ellis, tuvo una hija, Jeanne. Como madre, Ruth fue guiada por los principios de Unity. “Recuerdo que mamá decía, ‘no es tu asma, no la posees’ y ‘vamos a echar ese dolor de oídos para la calle’,” recuerda Jeanne. La salud robusta de Ruth y su espiritualidad vibrante impresionaban a todo el mundo. Mary Jane y Jeanne, oficialmente tía y sobrina, sólo se llevaban 12 años. Las niñas eran buenas amigas.
Inspirada por su hermana, el vínculo de Mary Jane con Unity se profundizó. En 1939, guardó un poco del dinero para el viaje de graduación de secundaria para hacer su primera visita a Unity Village. Los años pasaron. Mary Jane y Jeanne mantuvieron una relación estrecha. Cuando Mary Jane se casó con Joe Ondr, Jeanne fue su dama de honor. Mary Jane le “pagó” entregando a Jeanne el día de su boda.
Joe y Mary Jane llevaron una vida activa en Clayton, un suburbio de San Luis, Missouri. Viajaron y coleccionaron arte. Continuaron dando al donar silenciosamente a grupos de caridad en el área. “A Joe y a mí nos gustaba bromear que éramos el señor y la señora Anónimos”, dice ella. Una de las causas preferidas de Joe era un fondo de becas para estudiantes de ingeniería en la Universidad de Washington, donde había estudiado.
Cuando Joe falleció en el 2001, Mary Jane reexaminó su vida. A la verdadera manera de Unity, abrazó el ahora. “Alguien me dijo: ‘Tuviste una vida como la señora de Joe Ondr. Ahora tienes que tener otra vida como Mary Jane Ondr’.” Así que a los 79 años, la “nueva” Mary Jane Ondr vendió su casa en Clayton y se mudó a una comunidad de personas retiradas. Se metió de lleno en su nueva vida social y dio a la comunidad al servir como presidenta de la asociación de residentes.
Ruth Ellis falleció en el 2004. Una vez más, fue la oportunidad de seguir dando. “Quería crear un memorial viviente que honrara el espíritu de Ruth y las creencias de Unity. Joe estaba dedicado a las becas. Yo decidí que quería crear un programa de becas propio para apoyar a los estudiantes ministeriales de Unity.” El Programa de becas Mary Jane Ondr en honor de Ruth L. Ellis se convirtió en una realidad en el 2004. Cada año desde entonces, Mary Jane Ondr y Jeanne Abraham han viajado a Unity Village para conocer a la persona favorecida.
La estudiante ministerial Sheryl Myers es la más reciente becaria. Con un rostro fresco y energético, Sheryl atribuye su apariencia positiva a una vida espiritual gloriosa. “Espero ser todo lo que Dios me ha llamado a ser. Amor a Unity. Es mi corazón. Algún día me encantaría patrocinar a alguien en este llamado, así como Mary Jane lo ha hecho conmigo.”
Sheryl se graduará de Unity Institute en junio del 2009 y ha aceptado un cargo con Unity of the Heartland en Olathe, Kansas.
Los miembros de la familia mantuvieron su sentido del humor aún cuando los tiempos eran difíciles. Mary Jane se ríe de uno de sus primeros “regalos”. Sólo por gusto, llenó una caja con dinero de juguete. Se convirtió en un chiste ambulante, a medida que la caja pasaba de un familiar a otro. Llegó a ser una metáfora para una vida de dar gozoso.
La hermana de Mary Jane, Ruth Ellis, tuvo una hija, Jeanne. Como madre, Ruth fue guiada por los principios de Unity. “Recuerdo que mamá decía, ‘no es tu asma, no la posees’ y ‘vamos a echar ese dolor de oídos para la calle’,” recuerda Jeanne. La salud robusta de Ruth y su espiritualidad vibrante impresionaban a todo el mundo. Mary Jane y Jeanne, oficialmente tía y sobrina, sólo se llevaban 12 años. Las niñas eran buenas amigas.
Inspirada por su hermana, el vínculo de Mary Jane con Unity se profundizó. En 1939, guardó un poco del dinero para el viaje de graduación de secundaria para hacer su primera visita a Unity Village. Los años pasaron. Mary Jane y Jeanne mantuvieron una relación estrecha. Cuando Mary Jane se casó con Joe Ondr, Jeanne fue su dama de honor. Mary Jane le “pagó” entregando a Jeanne el día de su boda.
Joe y Mary Jane llevaron una vida activa en Clayton, un suburbio de San Luis, Missouri. Viajaron y coleccionaron arte. Continuaron dando al donar silenciosamente a grupos de caridad en el área. “A Joe y a mí nos gustaba bromear que éramos el señor y la señora Anónimos”, dice ella. Una de las causas preferidas de Joe era un fondo de becas para estudiantes de ingeniería en la Universidad de Washington, donde había estudiado.
Cuando Joe falleció en el 2001, Mary Jane reexaminó su vida. A la verdadera manera de Unity, abrazó el ahora. “Alguien me dijo: ‘Tuviste una vida como la señora de Joe Ondr. Ahora tienes que tener otra vida como Mary Jane Ondr’.” Así que a los 79 años, la “nueva” Mary Jane Ondr vendió su casa en Clayton y se mudó a una comunidad de personas retiradas. Se metió de lleno en su nueva vida social y dio a la comunidad al servir como presidenta de la asociación de residentes.
Ruth Ellis falleció en el 2004. Una vez más, fue la oportunidad de seguir dando. “Quería crear un memorial viviente que honrara el espíritu de Ruth y las creencias de Unity. Joe estaba dedicado a las becas. Yo decidí que quería crear un programa de becas propio para apoyar a los estudiantes ministeriales de Unity.” El Programa de becas Mary Jane Ondr en honor de Ruth L. Ellis se convirtió en una realidad en el 2004. Cada año desde entonces, Mary Jane Ondr y Jeanne Abraham han viajado a Unity Village para conocer a la persona favorecida.
La estudiante ministerial Sheryl Myers es la más reciente becaria. Con un rostro fresco y energético, Sheryl atribuye su apariencia positiva a una vida espiritual gloriosa. “Espero ser todo lo que Dios me ha llamado a ser. Amor a Unity. Es mi corazón. Algún día me encantaría patrocinar a alguien en este llamado, así como Mary Jane lo ha hecho conmigo.”
Sheryl se graduará de Unity Institute en junio del 2009 y ha aceptado un cargo con Unity of the Heartland en Olathe, Kansas.
Fuente : Unity
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