Tener visión es propio del ser humano. Quizás usted alguna vez tuvo ideas de lo que quería ser y hacer, y todavía tiene esas ideas. ¿Se ve usted siendo un abogado y comenzando su propia firma? ¿Piensa acerca de poseer un centro de cuidado infantil que tenga un currículo de primera clase para atender unos doscientos niños? ¿Quiere escribir una novela? ¿Sueña con regresar a la escuela y hacer algo con su educación y habilidades académicas?
Yo llego a la conclusión que la persona más pobre en el mundo es la persona sin un sueño. Un sueño, una visión, no provee dirección. Se ha dicho que si usted no sabe hacia donde va, cualquier camino lo llevará. No queremos terminar en cualquier camino de la vida.
Mientras la persona más pobre en el mundo es el que no tiene sueños, la persona más frustrada es alguien que tiene un sueño pero no sabe como realizarlo. Pero si usted puede tener esperanzas para el futuro, usted es rico de verdad, no importa cuanto dinero tenga en su cuenta de banco. No es cuestión de cuánto efectivo tenga o no, siempre que pueda ver lo que podría tener. Esta visión es la clave para la vida porque donde hay sueño, hay esperanza, y donde hay esperanza, hay fe, y la fe es sustancia, o cumplimiento de lo que está esperando.
Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo,
que si tuviereis fe como un grano de mostaza,
diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará;
y nada os será imposible.
Mateo 17:20
Tomado del Libro Devocional Diario De Poder
Autor: Dr. Myles Munroe
Editor Agenda de Dios: Olman Rímola
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