El amor que al principio te atrajo hacia Dios, es el mismo que esta noche te rodea y que estará siempre contigo, en cada situación. Cualquier que sea el escenario en que te desenvuelvas, permite que sea Él, quien te consuele.
Jeremías 31:3
Con amor eterno te he amado;
pro tanto te prolongué mi misericordia.
pro tanto te prolongué mi misericordia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario