¡Podemos tener una relación íntima con Dios! Para gozar de la presencia de Dios en nuestras vidas, y para asegurarnos de su presencia, debemos pasar tiempo con Él diariamente, conociéndolo y acercándonos más a Él en compañerismo.
Podemos hacer cosas que ayudan a experimentar su presencia, pero también es posible hacer otras que impiden es bendición. Por ejemplo, si caminamos por la paz y el amor de Dios –tanto en recibir su amor como permitir que ese amor fluya a través de nosotros hacia otros, experimentamos más de su presencia.
A cualquier persona que realmente desea conocerlo más, el Señor le mostrará cómo lo puede hacer. Debemos encontrar las cosas que nos acercan a Dios, y ponerlas en práctica.
Podemos ocultar e impedir nuestro sentido de la cercanía a Dios cuando seguimos nuestros deseos carnales y nuestros propios planes, sin consultarlo a Él, o también cuando nos esforzamos en hacernos aceptables para Él.
Nuestros esfuerzos deben ser más bien orientados a búsqueda de Dios mismo, tratando de conocerlo más, de escuchar su voz mejor, y de vivir en obediencia a sus preceptos.
Podemos disfrutar de su presencia o experimentar las presiones del mundo. Podemos sentir su presencia o ceder a los deseos de la carne. Podemos gozar de su presencia o sufrir la esclavitud del legalismo religioso.
La vida detrás del velo es maravillosa…!entra!
Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo
por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo
que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne.
Hebreos 10:19-20
Tomado del Libro Vida En La Palabra de Dios
Joyce Meyer
Editor Agenda de Dios: Olman Rímola
No hay comentarios:
Publicar un comentario