Los Manantiales

Los Manantiales
Renovación para el alma

lunes, 5 de enero de 2009

Oración

Hazme ir con calma. Señor! Calma los latidos de mi corazón, aquieta mi mente. Da calma a mis pasos con la visión del alcance eterno del tiempo. En medio de la confusión de este día, dame la quietud de las montañas eternas. Quiebra la tensión de mis nervios y músculos con la música suave de arroyuelos cantarines que viven en mi memoria. Ayúdame a conocer el poder mágico y restaurador del sueño. Enséñame el arte de tomar vacaciones de pocos minutos de duración. Ayúdame a detenerme para contemplar una flor, conversar con un amigo, acariciar un perro o leer unas líneas de un buen libro.
Hazme recordar cada día la fábula de la liebre y la tortuga para que pueda comprender que no es la carrera de los ligeros; que la vida tiene cosas más importantes que aumentar su velocidad. Hazme mirar las ramas de las encinas gigantescas para saber que es grande y fuerte porque creció con calma, pero con seguridad. Hazme ir con calma, Señor, e inspírame para que mis raíces se internen profundamente en el suelo de los valores permanentes de la vida y pueda yo crecer hacia las estrellas de mi gran destino. En el nombre de Jesús, Amén
(Autor desconocido)

No hay comentarios:

Indice de Reflexiones